La información confidencial es una propiedad empresarial valiosa y crítica que debe protegerse. Desde patentes hasta secretos comerciales, esta información puede ser la base del éxito de una empresa en el mercado. Sin embargo, a veces es necesario compartir esta información con terceros, ya sea una empresa subsidiaria, un contratista o un socio comercial. En tales casos, se requiere que la empresa proteja la información confidencial mediante el uso de autorizaciones de acceso a información confidencial y/o contratos de confidencialidad. En este artículo, examinaremos cuál es la diferencia entre estas dos herramientas de protección de la información confidencial.
Una autorización de acceso a información confidencial es un medio por el cual una empresa autoriza a un tercero el acceso a cierta información confidencial, generalmente por un período de tiempo limitado. Esta autorización puede ser específica en términos de qué información se puede compartir y para qué propósito, y a menudo se limita a la información necesaria para el proyecto o trabajo en cuestión. Las autorizaciones de acceso se utilizan a menudo para permitir que un contratista o una empresa subsidiaria acceda a información confidencial, aunque también pueden ser utilizadas para permitir que otros terceros accedan a esta información, como abogados o consultores.
Cuando se utiliza una autorización de acceso, la empresa que autoriza es responsable de asegurarse de que se tome la debida diligencia antes de conceder el acceso. Esto puede incluir la realización de una investigación de antecedentes y la verificación de las credenciales del tercero. Además, la empresa de la que se autoriza el acceso debe asegurarse de que se cumplan los términos de la autorización, incluyendo la eliminación de la información confidencial una vez que se complete el proyecto o trabajo en cuestión.
Un contrato de confidencialidad, también conocido como acuerdo de no divulgación (NDA), es un acuerdo legal entre dos partes en el que se estipula que la información confidencial que se comparte se mantendrá en secreto. El contrato de confidencialidad es un contrato jurídicamente vinculante que establece los términos y condiciones para la protección de la información confidencial y que puede incluir restricciones de uso o divulgación, obligaciones de notificación, una cláusula de no competencia y otras disposiciones relevantes. Un contrato de confidencialidad puede ser utilizado para proteger información confidencial en diversas situaciones, como la evaluación de una posible inversión, la discusión de un nuevo producto o tecnología, o la negociación de un acuerdo comercial.
El contrato de confidencialidad puede ser unilateral, es decir, puede ser utilizado por una empresa para proteger su información confidencial de un tercero, o puede ser bilateral, en el que ambas partes comparten información confidencial entre sí y se comprometen a protegerla. Es importante tener en cuenta que el contrato de confidencialidad no proporciona automáticamente protección legal a la información confidencial; sólo proporciona un medio por el cual las partes pueden hacer valer sus derechos. En caso de incumplimiento, se requiere la presentación de una demanda para hacer valer las obligaciones contenidas en el contrato.
La principal diferencia entre una autorización de acceso y un contrato de confidencialidad es que la autorización de acceso se utiliza para permitir que un tercero acceda a la información confidencial de la empresa, mientras que el contrato de confidencialidad se utiliza para proteger la confidencialidad de la información que se comparte entre dos partes. La autorización de acceso es una herramienta útil para permitir que terceros accedan a información confidencial de la empresa, mientras que el contrato de confidencialidad es una herramienta más amplia que puede proteger la información confidencial en diversas situaciones.
Otra diferencia importante es que la autorización de acceso es un documento interno de la empresa que se concede a terceros, mientras que el contrato de confidencialidad es un acuerdo entre la empresa y un tercero. El contrato de confidencialidad es un acuerdo legalmente vinculante que puede incluir disposiciones para la protección de la propiedad intelectual, la no competencia y otras disposiciones relevantes. En contraste, la autorización de acceso es una herramienta interna que se utiliza para permitir que terceros accedan a información confidencial de la empresa.
La protección de la información confidencial es esencial para el éxito de una empresa. Ya sea a través de la utilización de una autorización de acceso o de un contrato de confidencialidad, es importante que se tomen medidas para proteger la información confidencial en todas las etapas de su ciclo de vida. La autorización de acceso se utiliza para permitir que terceros accedan a información confidencial de la empresa, mientras que el contrato de confidencialidad se utiliza para proteger la confidencialidad de la información que se comparte entre dos partes. Ambas herramientas son importantes para proteger la información confidencial de la empresa y deben ser utilizadas de manera adecuada y estratégica.